« El concepto de obra de arte es tan amplio que ya no puede concebirse como algo monumental colgado de la pared de un museo o expuesto en una galería. De hecho, una obra de arte también puede ser pequeña ¡y transportable! Al menos esa es la idea de Eva Alarcón, una estilista/pintora que un día decidió cambiar el soporte de sus piezas, primero en papel y, después, en tela.

Por eso compró camisetas, faldas, medias, ropa interior, pantalones, abanicos... en fin, todo tipo de prendas y complementos de mujer, bebé y niño para pintarlas a mano. Después de venderlas en las tradicionales ferias de artesanía que puntualmente se organizan por toda la comunidad de Madrid, Eva ha decidido abrir una pequeña tienda con un amplio surtido de piezas, casi siempre únicas, que causan sensación cuando se regalan. Además, ha dejado hueco para que otros artesanos dejen allí sus creaciones.

Una vez en sus manos, Eva acaba con el convencional (cuando no directamente aburrido) de las prendas que adquiere utilizando todo tipo de técnicas: las pinta, las borda, les pone aplicaciones... "Es lo ahora llaman costumizar, pero yo prefiero llamarlo decorar o transformar", asegura. ¿Y cuáles son los dibujos con más éxito entre su clientela? Pues sirenas, hadas, rostros anónimos, flores, animales...

Por supuesto, Eva acepta hacer prendas por encargo. Y también se le pueden llevar prendas para que la artista las transforme.
Diario El Mundo, Sábado 3 de Julio de 2004